El Papa visitó un concierto escolar y deja mensaje de Navidad a los niños
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La undécima edición del concierto navideño InCanto, interpretado por los alumnos de la Escuela Pontificia Pablo VI de Castel Gandolfo, tuvo un asistente especial esta tarde. El Papa León XIV se unió a los estudiantes y sus familias en el gimnasio del colegio para presenciar la actuación musical, tras visitar previamente las instalaciones educativas.
El Pontífice se desplazó desde la cercana Villa Barberini, donde reside regularmente los martes, para asistir al evento. El concierto sirvió a los niños para desear una feliz Navidad a todos los asistentes y para subrayar, a través de su mensaje, que la verdadera riqueza no se mide por lo que se recibe, sino por la paz que se puede generar en uno mismo y en la relación con los demás.
Los alumnos, vestidos con jeans y camisas blancas, ocuparon sus lugares en el escenario escalonado. Sonrientes y visiblemente emocionados, interpretaron una selección de villancicos. Las melodías de "Adeste fideles", "Joy to the World", "Noël Noël" y "Astro del ciel" llenaron el gimnasio decorado festivamente y abarrotado de padres, profesores y personal del centro. En la primera fila tomaron asiento el obispo de Albano, monseñor Vincenzo Viva, el presidente de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica, monseñor Giordano Piccinotti, y el propio Papa.
Al finalizar el concierto, el Papa León compartió sus impresiones. "Fue hermoso escuchar canciones navideñas en italiano, latín, inglés y español", dijo. Escuchar a los niños cantar en diferentes idiomas, añadió, ayuda a todos a comprender que la Navidad despierta la alegría y la paz en el corazón de cada persona. El Pontífice también expresó su gratitud por la invitación, comentando con una sonrisa que esta había llegado "misteriosamente" y que estaba contento de haberla aceptado.
Reflexionando sobre una de las canciones interpretadas, cuya letra hacía referencia a "ángeles que traen amor", el Papa señaló que los propios niños habían traído amor a través de su música. Recordó las palabras de San Agustín, quien dijo que "quien ama canta", porque el amor permite al corazón captar lo que realmente importa.
"Dios quiso comunicarnos a todos el don del amor: eso es la Navidad", afirmó el Papa León, enfatizando que Dios se acerca a la humanidad, especialmente a los más pequeños y vulnerables. Expresó la esperanza de que este espíritu, celebrado en Navidad, pudiera vivirse no solo en estos días, sino durante todo el año. Citando el estribillo de otra canción, el Papa añadió: "Para nosotros esto es una gran invitación: hacer más para proclamar la paz, el amor y la unidad en el mundo".
Al concluir, el Papa León impartió su bendición a los niños y sus familias, animándoles a rezar juntos y a abrir sus corazones para reconocer la presencia de Dios, especialmente en los más pequeños. El Pontífice fue despedido con aplausos y alegres vítores. Recibió como regalos una raqueta de tenis y el uniforme escolar, y posó para una fotografía conmemorativa con los alumnos antes de su partida.
La Escuela Pontificia Pablo VI de Castel Gandolfo es un colegio católico de educación primaria situado a unos 700 metros de la Villa Barberini. Su construcción fue promovida por el Papa Pablo VI como un regalo a la comunidad local, siendo inaugurada por el mismo Pontífice el 12 de septiembre de 1968. En aquella ocasión, destacó la importancia de la educación católica para niños y jóvenes. En la actualidad, la escuela acoge a alrededor de 300 alumnos y ofrece un programa educativo inspirado en los principios católicos, enriquecido con actividades extracurriculares que incluyen deportes, música, idiomas extranjeros, educación cívica y educación alimentaria.
© SomosTV LLC-NC / Photo: © Vatican News
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