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Conductas que debes evitar con tus niños

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Lucia

Hay varios comportamientos que los padres deben evitar ante sus niños para garantizar su bienestar emocional y físico. Transmitir un mal ejemplo puede tener consecuencias en su desarrollo, dicen en Etapa Infantil.

Toda aquella conducta que cause un deterioro en las relaciones familiares, debe ser eliminada. Así, los padres (y cuidadores de los niños), deben ir con cuidado ante estas situaciones:

Peleas y discusiones constantes

Las peleas en el seno de la familia solo causan baja autoestima en los niños, además de inseguridad. La familia debe ser el entorno en el que los pequeños se sientan seguros y las discusiones no ayudan a desarrollar un apego seguro en los niños.

Faltas de respeto dentro de la familia

Siguiendo con las discusiones, las faltas de respeto son otro ingrediente a la hora de acabar con las relaciones familiares y el apego seguro de los niños. Además, estas faltas de respeto pueden ser copiadas por los niños como forma de expresión, algo que será muy difícil de corregir posteriormente.

Ataques constantes a personas externas

Siempre se ha dicho que el que es feliz no se pasa la vida criticando y juzgando a los demás. Esta frase es muy cierta, pues cuando nos enfocamos en nuestra familia, trabajo, amigos, etc., no nos queda tiempo para entrometernos en la vida de los demás. Sin embargo, si por cualquier motivo tenemos esta predisposición, es importante hacerlo lejos de los niños. Estos pueden desarrollar el mismo vicio y, por ende, criticar todo lo que tengan cerca. Esta actitud solo los llevará a tener malas relaciones con los demás.

Maltrato a los animales

Además de estar prohibido por ley, los niños desarrollarán una falta de seguridad y confianza ante aquellas personas que maltratan a los animales. Adicionalmente, este comportamiento, en el peor de los casos, puede ser imitado por ellos, lo que sin duda representará un gran problema en su desarrollo.

Faltas con el medioambiente

Es fundamental concienciar a los niños sobre la importancia de cuidar el medioambiente, pues nuestro planeta es el que nos aprovisiona con todo lo que necesitamos. Nuestro planeta se debe cuidar y los niños deben aprender buenas costumbres desde bien pequeños.

Falta de costumbres y hábitos

Los límites y las normas, en la familia, deben ser para todos los miembros y no solo para algunos de ellos. Está bien que los niños tengan normas, pues les ayuda a tener una rutina. Sin embargo, de poco nos servirá querer que los niños cumplan con las normas si los padres no hacemos lo mismo. De este modo, es importante que, si queremos, por ejemplo, que los niños se cepillen los dientes antes de acostarse, los adultos hagamos lo mismo. Una vez más, se trata de predicar con el ejemplo.

Sobrepasar todos los límites y normas familiares

Muy vinculado a la necesidad de límites y normas, los adultos también debemos estar sujetos a ellos a todos los efectos. Por ello, no debemos sobrepasar ninguno de los límites que se han establecido en la familia.

Falta de actividad

La actividad y el deporte es esencial para los niños pequeños, ya que estos deben desarrollar sus habilidades motoras. Por este motivo, cada vez son más los padres que les apuntan a todo tipo de clases extraescolares relacionadas con el deporte. Sin embargo, los niños necesitan más movimiento y, sobre todo, ver que en casa se apoya una vida activa y saludable. Por ello, no serán un buen ejemplo aquellas familias en las que un miembro, o varios de ellos, se pasan todo el día tumbados y sin hacer nada productivo.

Muestras de irresponsabilidad

Hay muchísimas maneras en las que podemos educar a nuestros hijos en la responsabilidad, pero ninguna de las técnicas nos ayudará si los adultos no somos responsables. Por ello, antes de pedir responsabilidad a los niños (que son quienes la están aprendiendo), debemos plantearnos si nosotros mismos lo somos. Es decir, ¿hacemos todo lo que podemos para seguir una rutina estable? ¿Estamos pendientes de las necesidades de la familia? ¿Somos organizados y mantenemos un empleo estable? Cualquier acción que implique responsabilidad debe ser compartida con los niños, como ejemplo.

Maltratos físicos y psicológicos

Hemos hablado de las faltas de respeto y de las discusiones en la familia. Sin embargo, no hemos mencionado el maltrato en ninguno de estos apartados y es que, por su gravedad, este merece un apartado especial.

Cualquier forma de maltrato debe ser evitada y no solamente delante de los niños. Es obvio que ellos nunca deben ser víctimas de maltrato y que, de ser conscientes de ello, debemos tomar medidas cuanto antes, sin importar quién sea el abusador. El maltrato, en todas sus formas, tiene consecuencias muy negativas en el desarrollo de los niños, ya sean víctimas directas o indirectas de este.

Dar ejemplo: funciona, siempre

Dar ejemplo siempre es la mejor manera de educar y criar a nuestros hijos. Por ello, los padres somos los primeros que debemos tener un cambio de actitud en nuestras maneras si queremos evitar que estas sean copiadas por los más pequeños.

Como adultos, son muchos los errores que cometemos. No podemos ser perfectos, ni para nuestros hijos, por mucho que lo intentemos. Sin embargo, hay ciertas actitudes que ya no deberían formar parte de nuestra personalidad y, mucho menos, cuando tenemos niños. Con todo, es importante identificar estos puntos débiles y trabajar en ellos:

nuestros hijos nos lo agradecerán, pues crecerán en un entorno mucho más seguro y sano. Y, lo mejor de todo, es que nosotros mejoraremos como personas, nos sentiremos mejor y podremos disfrutar mucho más de la vida.

Photo: © PXHere

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