Noticias

La dificultad de dialogar con tus hijos sobre cuestiones importantes

publisher

Lucia

La comunicación, franca y directa, con otros adultos se nos hace a veces difícil, y tendemos a reprimirnos o suavizar las cosas por miedo a molestar. Sin embargo hablar con nuestros hijos de temas importantes tampoco es fácil, y menos cuando la conversación está impuesta por sucesos imprevistas, dice Etapa Infantil.

Ya sea un cambio de colegio, una separación, la muerte de un ser querido, la pérdida de poder adquisitivo en la familia o una guerra, hay muchísimas situaciones que se escapan de nuestro control y frente a las que no podemos hacer nada para proteger a nuestros hijos.

En estos casos, la mejor solución consiste en hablar con los niños sobre esos temas difíciles para explicarles de manera sencilla y clara qué sucede y brindarles algunos recursos para lidiar con ese momento. Sin embargo, todo padre o madre que haya atravesado por un momento similar sabe que a veces no es nada fácil hablar sobre temas difíciles con los niños. No es sencillo, pero es necesario. Te explicamos por qué no deberías evitar este tipo de conversación con los niños y te brindamos algunas claves para hacer más llevadero ese momento.

No evites los temas difíciles

En un intento de proteger a los niños y ahorrarles sufrimientos innecesarios, a veces los padres optan por ocultarles temas difíciles a los más pequeños de casa. Sin embargo, esto puede ser un gran error a largo plazo. Es importante tener en cuenta que los niños se percatan de muchas más cosas de las que los adultos imaginan, por lo que evitar hablar de temas difíciles puede generarles una mayor inseguridad y/o sembrar temores innecesarios que pueden afectar el adecuado desarrollo infantil. En muchos casos, también puede ser fuente de malentendidos ya que al no hablar sobre el tema los niños pueden crearse una versión propia de lo sucedido que, a menudo, tiende a ser errónea.

Esto además de debilitar la confianza que tienen en sus padres. A fin de cuentas, los progenitores deberían ser la principal fuente de apoyo para los niños, las personas a las que acuden cuando tienen dudas o están atravesando por un momento complicado. En sus brazos es donde deberían calmarse, encontrar las respuestas a sus preguntas y las pautas para seguir avanzando. Sin embargo, cuando los niños no encuentran ese apoyo en los padres no solo les genera una mayor inseguridad sino que pierden la confianza en ellos, lo cual puede terminar por debilitar la relación.

Por eso, es importante sincerarse y hablar abiertamente con los niños, incluso sobre los temas más difíciles y espinosos. De esta manera, no solo te aseguras que comprendan en realidad lo que han sucedido y tengan toda la información que necesitan, sino que les brindas la oportunidad de expresar sus ideas, preocupaciones y emociones al respecto. También es una forma de prepararlos para la vida, animándolos a enfrentar los problemas en lugar de evitarlos, a la vez que puede ayudarles a desarrollar la resiliencia desde una edad temprana.

© SomosTV LLC-NC / Photo: © Family First / StockSnap

Comentarios

Deja una respuesta

NOTICIAS DESTACADAS