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¿Puedes distinguir antes de ir al pediatra si tu niño es hiperactivo o simplemente travieso?

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Lucia

La energía inagotable, la curiosidad constante y las travesuras ocasionales son parte integral de la niñez. Sin embargo, es común que los padres se pregunten si el comportamiento de sus hijos es simplemente producto de una naturaleza traviesa o si podría indicar un trastorno más profundo, como el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH). Es fundamental entender las diferencias para proporcionar el apoyo y la orientación adecuados a los niños. Estas son las recomendaciones de los especialistas:

1. Duración y Frecuencia:

     Travieso: Las travesuras típicas suelen ser esporádicas y ocurren en situaciones específicas. Por ejemplo, desordenar un área de juego durante un juego animado.

     Hiperactivo: El comportamiento hiperactivo es constante y ocurre en múltiples contextos. Los niños con TDAH pueden tener dificultades para moderar su energía en la escuela, en casa y en otros entornos.

2. Atención y Concentración:

     Travieso: Aunque un niño travieso puede tener dificultades para concentrarse en una tarea específica, generalmente puede participar en actividades que le interesan.

     Hiperactivo: Los niños con TDAH a menudo tienen problemas persistentes para mantener la atención en actividades que no les resultan estimulantes. Se distraen fácilmente y pueden cambiar rápidamente de una tarea a otra.

3. Impacto en las Relaciones Sociales:

     Travieso: Aunque las travesuras pueden causar conflictos ocasionales, los niños traviesos generalmente mantienen relaciones sociales saludables.

     Hiperactivo: La hiperactividad puede afectar negativamente las relaciones sociales, ya que los niños con TDAH pueden tener dificultades para seguir las reglas del juego y participar en interacciones estructuradas.

4. Evaluación Profesional:

     Travieso: El comportamiento travieso suele responder positivamente a la disciplina y las pautas establecidas por los padres o cuidadores.

     Hiperactivo: Si los problemas de atención y la hiperactividad persisten y afectan significativamente la vida diaria, puede ser necesario buscar la evaluación de un profesional de la salud, como un pediatra o un psicólogo infantil.

5. Entorno Escolar:

     Travieso: Los niños traviesos pueden tener dificultades ocasionales en la escuela, pero suelen adaptarse y participar en actividades académicas.

     Hiperactivo: La hiperactividad puede interferir en el rendimiento académico y en la capacidad del niño para seguir las instrucciones en el entorno escolar.

Es crucial recordar que cada niño es único, y el comportamiento varía ampliamente. Siempre se recomienda buscar la orientación de profesionales de la salud si hay preocupaciones persistentes sobre el comportamiento de un niño. La detección temprana y el apoyo adecuado pueden marcar la diferencia en el desarrollo y el bienestar a largo plazo de los niños.

© SomosTV LLC-NC / Photo: © PixaHive

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