Las bases del éxito en el desarrollo infantil:, según Robert Pianta (y II)
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Lucia
Robert Pianta, director del Centro de Estudios Avanzados sobre Enseñanza y Aprendizaje de la Universidad de Virginia, comparte en El Tiempo sus ideas sobre las conexiones cerebrales, el vínculo entre niños y maestros, y la educación temprana.
La calidad de estas interacciones es crucial, ya que son la base sobre la cual los niños construyen su desarrollo. Según Pianta, "las interacciones cotidianas brindan a los niños una sensación de seguridad emocional y previsibilidad", lo que a su vez fomenta la atención hacia información nueva e interesante y estimula el pensamiento y el aprendizaje.
Las relaciones de calidad son fundamentales no solo en el hogar, sino también en los entornos educativos, como jardines, centros de desarrollo infantil y aulas. De hecho, Pianta subraya que "todos estos beneficios de las interacciones ocurren no solo en el hogar, sino también en los jardines, centros de desarrollo infantil y en las aulas todos los días".
A la pregunta de cómo medir estas interacciones para que cumplan su propósito, Pianta destaca que se pueden evaluar mediante la observación en el aula. Los observadores deben estar capacitados para identificar características clave, como la capacidad de los maestros para notar las señales de ayuda de los niños y responder de manera oportuna, su calidez emocional y su capacidad de prestar atención a todos los niños por igual.
Pianta también señala que los maestros pueden aprender a mejorar sus interacciones observando a sus colegas, comprendiendo la importancia de estas interacciones en el desarrollo de los niños y recibiendo retroalimentación de un entrenador sobre cómo se relacionan con los niños.
El estrés es otro factor relevante en las interacciones entre maestros y niños, ya que, como Pianta destaca, "los maestros estresados pueden responder de forma reactiva o negativa al comportamiento de los niños y ser insensibles". Para el desarrollo infantil, es esencial mantener un ambiente predecible y emocionalmente seguro.
Pianta concluye resaltando la importancia de la educación temprana y su impacto en el éxito educativo a largo plazo. Señala que los niños que reciben educación temprana de calidad desarrollan habilidades esenciales que los preparan para el éxito futuro en su educación. Los primeros años son cruciales para adquirir habilidades lingüísticas, cognitivas y de autorregulación, y estos cimientos son esenciales para el éxito en niveles educativos posteriores.
© SomosTV LLC-NC / Photo: © University of Minnesota
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