¿Y si lo que entendíamos por desarrollo infantil normal no lo es?
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Lucia
El desarrollo infantil ha sido tradicionalmente evaluado a través de estándares que muchas veces se consideran universales. Sin embargo, estas normas suelen estar profundamente influenciadas por el contexto cultural y social en el que se originan, lo que plantea preguntas fundamentales sobre su aplicabilidad a nivel global, escribieron Samuel Forbes, profesor asociado de psicología de la Universidad de Durham, y Prerna Aneja, catedrática en psicología de la Universidad de Anglia del Este, en The Conversation.
Normas y comparaciones implícitas
Padres, cuidadores y profesores a menudo recurren a conceptos de lo que es "normal" para evaluar el desarrollo de un niño. Estas evaluaciones se basan en puntos de referencia que, aunque útiles, son también arbitrarios. Por ejemplo, es común asumir que un niño debería ser capaz de trepar muebles a los dos años.
En el ámbito de la investigación, esta idea de normalidad se amplifica.
Muchos estudios que analizan el desarrollo infantil afirman, de manera implícita o explícita, que sus hallazgos son universales. Esto puede deberse a la tentación de generalizar conclusiones o al modo en que los medios de comunicación y lectores interpretan los datos. Como resultado, lo que se encuentra en un grupo de niños suele tomarse como estándar para investigaciones futuras.
Sesgos académicos y su impacto
Gran parte de la investigación sobre desarrollo infantil proviene de países occidentales ricos, como Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Francia y los Países Bajos. Estos países han definido muchos de los hitos de desarrollo que circulan globalmente.
En los países en desarrollo, los investigadores enfrentan dificultades para realizar estudios que no estén comparados con poblaciones occidentales. Esta exigencia establece a los niños occidentales como el estándar implícito, sin considerar si esas comparaciones son adecuadas.
Uno de los desafíos más importantes en este campo es que el desarrollo infantil ocurre en un contexto cultural que no puede separarse de los datos. Factores como el entorno físico, los estilos de crianza, la ubicación y el clima interactúan de manera compleja para moldear el desarrollo.
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