¿Realmente cuánto tiempo pueden pasar los niños al sol si llevan protector?
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Lucia
La radiación solar es dañina para la piel, y -como saben- puede llevar a provocar a la larga cáncer de piel. Además, los abusos se acumulan y tienen consecuencia en la edad adulta. Por tanto, hoy la mayoría de los padres y madres no olvidan una crema solar protectora a la hora de acudir a la alberca o la playa. Sin embargo, no son pocas las personas que se preguntan si están convenientemente protegidos con esas cremas cuánto tiempo pueden bañarse o jugar bajo el sol. Te lo contamos.
El tiempo que un niño puede pasar al sol, incluso con protector solar, depende de varios factores, como la edad del niño, el tipo de piel, la intensidad del sol y las condiciones ambientales. Sí podemos darte lgunas pautas generales a tener en cuenta:
Edad del niño: Los bebés menores de 6 meses tienen una piel extremadamente sensible y no se recomienda exponerlos directamente al sol. Es preferible mantenerlos a la sombra y proteger su piel con ropa adecuada y sombreros.
Tipo de piel: Los niños con piel clara y cabello rubio o pelirrojo son más propensos a quemarse con el sol y deben tener una protección adicional. La piel oscura tiene más pigmento protector natural, pero aún así requiere protección solar.
Intensidad del sol: Es importante tener en cuenta la hora del día en la que se expone al sol. Los rayos solares son más fuertes entre las
10 a.m. y las 4 p.m. Durante estos períodos, se debe tener precaución adicional y limitar la exposición al sol.
Factor de protección solar (FPS): El uso de protector solar es fundamental para proteger la piel de los niños. Se recomienda utilizar un protector solar con un FPS de al menos 30 y que sea resistente al agua. Aplícalo generosamente en todas las áreas expuestas de la piel y repite la aplicación cada 2 horas o después de nadar o sudar.
Condiciones ambientales: La temperatura, la humedad y la altitud también pueden afectar la tolerancia al sol. En climas calurosos y húmedos, es posible que los niños se sientan más incómodos y necesiten descansos más frecuentes en la sombra.
En general, se recomienda limitar la exposición directa al sol y buscar sombra siempre que sea posible, especialmente durante las horas pico de radiación solar. Incluso con protector solar, es importante recordar que ninguna protección solar es absoluta y que la mejor manera de proteger a los niños del sol es combinar varias medidas de protección, como el uso de ropa protectora, sombreros y gafas de sol.
Siempre consulta con un profesional de la salud o pediatra para obtener recomendaciones específicas para tu hijo, especialmente si tiene alguna condición médica o toma medicamentos que pueden aumentar la sensibilidad al sol.
© SomosTV LLC-NC / Photo: © Kampus Production / Pexels
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