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Trucos para que tus niños accedan a platillos más saludables

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Lucia

Acostumbrar a los niños a comer de manera saludable puede ser un desafío, pero con algunos trucos, los padres pueden fomentar hábitos alimenticios más equilibrados. Según Joaquín Suárez, director de Gastronomía y Desarrollo Sostenible de Sodexo, la clave está en transformar la alimentación en una experiencia positiva y educativa desde la infancia. Estos son algunos de sus consejos útiles para lograrlo:

1. Involúcralos en la cocina

Hacer que los niños participen activamente en la preparación de las comidas es un buen punto de partida. Puedes asignarles tareas sencillas como revolver los huevos, agregar sal o mezclar ingredientes. Esto no solo aumenta su interés por lo que están cocinando, sino que también los ayuda a conocer los alimentos que luego estarán en sus platos.

2. Estimula sus sentidos

Los niños se sienten atraídos por los estímulos sensoriales. Invítalos a oler las hierbas frescas como el cilantro o la rúgula, a observar el vibrante color rosado del salmón o el verde de la patilla, y a tocar diferentes texturas, como la suavidad de la mantequilla o la rugosidad de la piel de un melón. Estos estímulos sensoriales crean una conexión más fuerte con la comida y la experiencia de comer.

3. Crea historias alrededor de la comida Convertir la preparación de alimentos en una historia puede hacer que los niños se emocionen más por probar nuevos platillos. Puedes contarles cuentos sobre los ingredientes o animarlos a inventar sus propias historias. Este enfoque lúdico transforma la comida en una aventura, haciendo que sea más fácil para ellos aceptar alimentos saludables.

4. Reemplazos saludables

Los alimentos grasosos y los dulces suelen ser los favoritos de los niños, pero no son los más nutritivos. Sin embargo, puedes modificar algunos ingredientes de estas comidas para hacerlas más saludables. Por ejemplo, puedes preparar una pizza casera con masa integral o agregar vegetales en las hamburguesas. De esta forma, ellos disfrutarán de sus platos favoritos, pero con un valor nutricional mucho mayor.

5. Presentación atractiva

Los niños suelen "comer con los ojos", por lo que la presentación del plato es fundamental. Hacer que la comida se vea divertida y colorida, o incluso crear figuras o personajes con los alimentos, puede motivarlos a probar lo que hay en su plato. Un plato visualmente atractivo es más probable que despierte su curiosidad y apetito.

La cocina como espacio educativo

Más allá de los trucos, Suárez resalta que la cocina es un lugar ideal para que los niños aprendan, no solo sobre comida, sino también sobre disciplina, creatividad y trabajo en equipo. Hacer de la cocina una experiencia agradable y divertida es clave para que los más pequeños desarrollen hábitos saludables que les acompañen durante toda su vida.

© SomosTV LLC-NC / Photo: © Bing IG

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