Embarazo con perros… “los mejores cuidadores”
publisher
Lucia
En su blog en MujerHoy.com, la actriz Patricia Montero compartió lass experiencias que compartió durante su primer embarazo con los perros de la casa, que -en su opinión- vivieron con ella la dulce espera de una forma tan especial que hasta cambiaron sus propias costumbres y actitudes, hasta convertirse, dijo, en "mis mejores cuidadores".
Después de meses observando a Mara y a Tomillo (éste último es nuestro segundo perrrito, es el hijo de Mara), puedo contaros con más detalle como está siendo la experiencia de compartir cada día de mi embarazo con ellos, dijo Patricia.
"Como muchos sabréis soy una amante de los perros, me parecen el mejor amigo y compañero, pero con todo esto del embarazo aún me estoy 'enamorando' más de ellos. Los perros tienen la capacidad de ver y percibir muchas cosas más que nosotros, cambios de clima, enfermedades...
Aunque Mara y Tomillo no sepan que estoy esperando un bebé, creo que notan y sienten cambios en mi día a día, en mi manera de comportarme, en mis emociones, mi postura... Perciben estos cambios y se comportan de manera distinta conmigo.
Me siguen a todas partes. Especialmente Mara, que se ha convertido en mi guardiana particular... Ella es muy sensiblona y cariñosa pero, ahora lo es multiplicado por 5.
Quiere atención constante y de la misma manera quiere atenderme todo el rato. Cuando estoy tumbada en el sofá, se pone a mi lado y si no le hago caso se pone sobre mi barriga. Lis nota cuando alguno de ellos lo hace, porque reacciona moviéndose un montón.
Cuando voy sin camiseta a Mara le encanta besar mi barriga, ¡es alucinante!. A veces tengo que tener cuidado porque depende en la postura que esté sentada o tumbada me puede hacer daño, porque ella a toda costa tiene que conseguir ponerse sobre mi panza, jaja.
Cuando estamos cenando o comiendo, se sienta justo debajo de mí y quiere subir a la fuerza sobre mis rodillas (he de decir, que nuestros perros no son de los que piden comida todo el rato. Están educados de manera que estén a unos metros de nosotros mientras comemos. Así que no es un comportamiento normal).
En la ducha me puedo olvidar de la intimidad. Se sienta sobre la alfombra y no se mueve de ahí hasta que salgo (esto tampoco lo hacía antes). Tomillo algunas veces se une y se tumba a su lado.
Hace unos días me disponía a ir a clase de Yoga y en Madrid diluviaba. Mara no lo había hecho nunca, pero esta vez se puso sobre el felpudo de mi casa impidiéndome el paso, no me dejaba salir... jaja.
En el parque de perros, que es ahí donde saco a Mara y a Tom a pasear, la actitud de ella es especialmente protectora. Tomillo se vuelve loco jugando con los demás perros, pero Mara no se separa de mí y depende como le dé el día, le ladra a todo el que se me acerca.
Muchos perros tienen una actitud diferente conmigo, algunas veces incluso me han llegado a rodear varios. El otro día viví una experiencia súper bonita. Coincidí con un perro que había sido maltratado y no se acercaba a nadie, y tras varios intentos fallidos de tocarle y decirle cosas cariñosas, me dejó acariciarle e incluso movía la cola. ¡La dueña estaba emocionada! Me contó que era la primera persona desde que lo habían adoptado que había conseguido tocarle...
He pensado varias veces sobre cómo se portarán Mara y Tom con Lis, y creo que serán unos grandes amigos de la pequeña. Al fin y al cabo están viviendo toda su formación a mi lado y creando un vínculo, que de alguna manera ambas partes tienen que sentir...
Creo además, que la convivencia de un niño con un perro lejos de ser negativa es muy positiva para evitar miedos y traumas. Además, he leído que "los niños que conviven con animales en casa, entran en contacto con más bacterias y eso fortalece sus defensas, favoreciendo su sistema inmunológico".
Está claro que nuestros amigos peludos son y serán los mejores compañeros de viaje. Además de hacernos compañía, hacernos reír en momentos difíciles, cuidarnos y mimarnos cuando lo necesitamos son, nuestros mejores guardianes.
Photo: © dodo3 / pixabay
Comentarios