¿Tus niños tienen asma? Tal vez debiste hacer ejercicio físico durante embarazo
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Lucia
Un reciente estudio realizado en Finlandia sugiere que el ejercicio regular durante el embarazo podría reducir significativamente el riesgo de asma en los hijos. Según la investigación, las mujeres que realizan actividad física al menos tres veces por semana durante el embarazo tienen casi un 50% menos de probabilidades de que sus hijos desarrollen esta afección crónica.
El asma es una enfermedad que afecta a millones de personas en todo el mundo. Según datos de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, cerca de 25 millones de personas padecen esta condición en ese país, incluyendo 4,7 millones de niños. En España, la cifra asciende a tres millones de casos, con una prevalencia en niños cercana al 6%, lo que equivale a aproximadamente 397.000 menores de 14 años.
Esta enfermedad, caracterizada por inflamación y constricción de las vías respiratorias, puede manifestarse a cualquier edad. Aunque no tiene cura, sus causas están vinculadas a factores genéticos y ambientales.
Según estudios, los hijos de madres asmáticas tienen tres veces más probabilidades de desarrollar la enfermedad, mientras que el riesgo se reduce a 2,5 veces en los hijos de padres asmáticos. Sin embargo, la predisposición genética no siempre se traduce en la aparición de la enfermedad, ya que factores como la contaminación, el tabaquismo, el sobrepeso y otros elementos del entorno desempeñan un papel importante.
Beneficios del ejercicio durante el embarazo
El estudio, liderado por Pirkka Kirjavainen, investigadora de la Universidad de Finlandia Oriental, analizó datos de 963 parejas madre-hijo. Las madres completaron cuestionarios durante el primer y el tercer trimestre del embarazo, proporcionando información sobre sus niveles de actividad física. Los resultados mostraron que aquellas que realizaron ejercicio regular tenían menos probabilidades de que sus hijos fueran diagnosticados con asma.
“Demostramos por primera vez que, en realidad, también podría proteger del desarrollo del asma”, señaló Kirjavainen.
La actividad física durante el embarazo ya había sido reconocida por sus múltiples beneficios, como la prevención de la diabetes gestacional y la mejora de la salud cardíaca y pulmonar. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, se recomienda que las mujeres embarazadas realicen al menos 150 minutos de ejercicio moderado a la semana, como caminar, practicar yoga o montar en bicicleta.
El ejercicio también influye en el desarrollo del feto, favoreciendo un mejor crecimiento pulmonar, cardíaco y cognitivo. Por el contrario, la inactividad durante el embarazo podría tener efectos negativos. Un estudio de 2022 realizado en Noruega y Suecia señaló que los bebés de tres meses de madres inactivas presentaban una mayor probabilidad de tener una función pulmonar baja.
Stephen Kimura, alergólogo e inmunólogo en Florida, destacó la importancia de estos hallazgos, ya que ofrecen a las mujeres embarazadas una forma accesible de reducir el riesgo de asma en sus hijos. Según Kimura, “si podemos identificar a los individuos de alto riesgo y alterar los cuidados maternos para disminuir el asma, sería estupendo”.
Kimura también explicó que frecuentemente trata a mujeres embarazadas preocupadas por cómo prevenir el asma en futuros hijos. A partir de este estudio, afirma que puede recomendar algo relativamente sencillo, como hacer ejercicio moderado tres veces por semana.
Aunque las recomendaciones generales sugieren 30 minutos de actividad física cinco días a la semana, Emma-Reetta Musakka, coautora del estudio, enfatizó que cualquier ejercicio es mejor que ninguno. Según Musakka, incluso las mujeres que tienen limitaciones físicas pueden beneficiarse de actividades ligeras, incluidas aquellas que se realizan sentadas.
“Nuestra investigación demuestra que es mejor hacer algo que no hacer nada”, concluyó.
© SomosTV LLC-NC / Photo: © Bing IG
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