El baño de los más pequeños: Cuánto y cómo para una higiene correcta sin dañar su piel
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Hace cuatro años, la pareja de actores Kristen Bell y Dax Sheppard provocó un debate encendido entre los padres al admitir públicamente que no bañaban a sus hijos hasta que la suciedad era visible. Si bien la revelación fue tachada de irresponsable por algunos, muchos otros respiraron aliviados, sintiendo que su propia vara de medir en la higiene infantil era compartida. Hoy, esa práctica que parecía ser una excentricidad de celebridades se alinea con una tendencia creciente en el discurso dermatológico, que ha desplazado el foco de la limpieza total hacia la protección de la barrera cutánea y el microbioma.
Los estudios recientes han comenzado a sugerir que bañar a los bebés con demasiada frecuencia puede incrementar la probabilidad de que presenten disfunción en la barrera cutánea. Esto implica que el escudo natural de la piel deja de retener la humedad y de mantener a raya a los irritantes, facilitando la aparición de sequedad e irritación. En consecuencia, las pautas actualizadas de la Academia Estadounidense de Pediatría y dermatólogos canadienses convergen al recomendar baños breves con limpiadores suaves y solo cuando sean necesarios. Además, se insiste en la importancia de aplicar crema hidratante inmediatamente después.
La Piel Infantil, un Órgano más Sensible
Según el Toronto Dermatology Centre, las investigaciones indican que la piel de los niños pequeños es más fina, suave y sensible que la de los adultos, lo que la hace más vulnerable a la pérdida de humedad y a la irritación. Esta sensibilidad eleva el riesgo de problemas cutáneos como el eccema, que puede verse exacerbado por ducharse o bañarse en exceso.
Bañar a los niños de manera frecuente, sobre todo si se utiliza agua caliente o jabones fuertes, tiene el efecto de eliminar los aceites naturales, rompiendo esa barrera protectora de la piel. Es importante recordar que el objetivo no es esterilizar al niño, y que cierta exposición a microbios es, de hecho, beneficiosa para el desarrollo del sistema inmunitario.
El Dr. Benjamin Barankin, director médico y fundador del Toronto Dermatology Centre, establece una pauta general: antes de alcanzar la pubertad, bañarse o ducharse una vez cada dos o tres días se considera adecuado, aunque las necesidades pueden variar de un niño a otro.
Frecuencias y Cuidados según la Edad
Las recomendaciones sobre la frecuencia del baño varían considerablemente a lo largo de las etapas de crecimiento, ajustándose al nivel de actividad y la dieta del niño:
Recién nacidos (0-6 meses): No es necesario un baño diario completo. Dos a tres veces por semana es suficiente, o incluso menos si no hay suciedad evidente. Mientras el cordón umbilical no haya caído y la zona no esté curada, solo se deben realizar baños de esponja, ya que el jabón alrededor del muñón podría provocar una infección. La limpieza de "cabeza y cola", enfocada en el rostro, cuello, pliegues de la piel y la zona del pañal, puede ser suficiente entre baños completos. Dada la extrema sensibilidad de su piel, se debe usar agua tibia y limpiadores de bebé suaves y sin fragancia, o incluso solo agua.
Bebés (6-12 meses): A medida que ganan movilidad y comienzan a ingerir alimentos sólidos, la necesidad de baño podría aumentar ligeramente, pero el baño diario sigue sin ser imprescindible. Se sugieren dos o tres baños completos por semana, o más si las comidas son particularmente sucias. La supervisión constante es crucial. Se debe usar una pequeña cantidad de jabón de bebé suave con pH neutro y enjuagar a fondo para prevenir irritaciones.
Niños pequeños (1-3 años): Su mayor actividad física, el juego y las actividades al aire libre aumentan la propensión a ensuciarse. Tres o cuatro baños por semana suelen ser suficientes, aunque pueden ser diarios si son muy activos, sudan mucho o tienen suciedad visible. En esta etapa, el baño se convierte en una parte lúdica de la rutina (con juguetes o burbujas suaves) que puede ayudar a la relajación y el sueño.
Se debe continuar con productos suaves y evitar la exposición prolongada al agua caliente.
Preescolares y niños mayores (3+ años): La exposición a gérmenes y el aumento de la actividad física pueden llevar a la necesidad de un baño más frecuente. El baño diario puede ser habitual, sobre todo después de deportes o si comienza a aparecer olor corporal (generalmente cerca de la pre-pubertad). Es el momento de inculcar hábitos de higiene, como lavarse la ingle, las axilas y los pies. Se deben seguir utilizando jabones suaves e hidratantes, especialmente si el niño tiene eccema o piel sensible.
Existen factores ambientales, de estilo de vida o de salud que podrían requerir un aumento en la frecuencia del baño, como la actividad deportiva intensa, el clima cálido y húmedo (para evitar la miliaria o sarpullido por calor) o condiciones específicas de la piel. Sin embargo, si el baño diario forma parte de la rutina familiar, se puede mantener siempre que se usen productos suaves y se vigile la salud de la piel.
El baño va más allá de la mera limpieza. Cumple funciones importantes en el desarrollo y la rutina familiar:
Ayuda a establecer rituales nocturnos que contribuyen a un mejor descanso.
Crea un entorno relajado para la vinculación y la conversación entre el niño y el progenitor.
Fomenta el desarrollo sensorial a través del contacto con el agua, los juguetes y las burbujas.
Brinda la oportunidad de enseñar conceptos como las partes del cuerpo y la seguridad en el agua.
Puede tener un efecto calmante en niños inquietos o sobreestimulados.
Para mantener la piel sana durante el baño, es esencial utilizar agua tibia (probándola en la muñeca o el codo), limitar la duración del baño a un máximo de cinco a diez minutos, secar la piel dando golpecitos suaves y aplicar crema hidratante dentro de los primeros tres minutos para fijar la hidratación. La vigilancia constante es imprescindible.
Al elegir productos, la recomendación general es buscar aquellos que sean sin fragancia, suaves para la piel, que no contengan alérgenos comunes y que no obstruyan los poros. En este sentido, la Asociación Canadiense de Dermatología reconoce un grupo reducido de productos que cumplen estos requisitos, entre los que se encuentran la Loción de Bebé y el Champú y Gel de Baño de Bebé Cerave. Si bien la lista es pequeña, sirve como un punto de partida para identificar opciones seguras.
Observación y Ajuste Constante
La clave reside en la observación y el equilibrio. Es posible que sean necesarios menos baños si la piel del bebé se presenta seca, escamosa, enrojecida o con picazón, o si los síntomas del eccema empeoran. Por el contrario, un aumento en la frecuencia podría ayudar si hay olor corporal persistente, suciedad visible o erupciones en los pliegues de la piel. Se deben observar y ajustar las rutinas a las necesidades particulares de cada niño, siendo la flexibilidad la opción más eficaz para algunas familias.
Si se presentan sarpullidos persistentes o que empeoran, signos de infección (como fiebre o pus) o preocupaciones continuas sobre la salud de la piel, la recomendación es buscar asesoramiento profesional.
No existe una respuesta única sobre la frecuencia ideal del baño, ya que depende de la edad, el nivel de actividad y las necesidades individuales de la piel. Las pautas universales son claras: priorizar el uso de productos suaves, agua tibia y la hidratación inmediata para mantener la salud cutánea, relegando la noción del "baño diario" a un segundo plano, sobre todo en los niños más pequeños.
© SomosTV LLC-NC / Photo: © Negative Space

























































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































































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